Las cuatro razas autóctonas ganaderas de Zamora huyen del peligro de extinción
Las ayudas provinciales para bovino alistana-sanabresa, sayaguesa, asnal zamorano-leonés y caprino de la meseta.
Irene Barahona/ La Opinión de Zamora
La supervivencia de las razas autóctonas ganaderas es la apuesta de Zamora, una provincia que atesora los cuatro núcleos de población más importantes de la raza de burros zamorano-leoneses, las razas bovinas de sayaguesa y alistana-sanabresa y la caprina agrupación de las mesetas. En defensa y promoción de esta ganadería “en peligro de extinción”, la Diputación de Zamora ha resuelto ayudas por una cuantía total de 200.000 euros distribuidas entre asociaciones y ganaderos, para asegurar tanto su supervivencia como promoción.
Las ayudas de la institución provincial llegan como una medida de apoyo a la supervivencia de estas especies, oriundas de Zamora, y en muchos casos, provincia en la que se encuentra la gran parte del censo de estas razas catalogadas en peligro de extinción por el Ministerio de Agricultura, que arroja datos como que actualmente la bovina alistano-sanabresa encuentra el 75% de su población en un radio de 50 kilómetros, al igual que la caprina de la meseta, el burro zamorano leonés y la sayaguesa. Razas cuya población corazón está en las comarcas zamoranas. En concreto, la alistana-sanabresa es la que cuenta con un mayor número de cabezas de ganado, a pesar de encontrarse en recesión respecto a décadas anteriores. Esta raza bovina cuenta con 28 ganaderías con una media de 99 cabezas que aglutinan con un total de 2.693 animales, de las que 2.311 están en Zamora, lugar donde a pesar del descenso continuado se encuentra en pleno impulso para conseguir que la población se estabilice. Algunos ejemplares se encuentran diseminados por el resto de la comunidad: 172 en Segovia, 82 en Burgos, 74 en Palencia, 28 en León y 24 en Ávila.
La promoción de razas autóctonas funciona. El burro zamorano-leonés se encuentra en expansión tanto en censo demográfico como en territorio, presente en casi todas las comunidades autónomas. 1.014 ejemplares se distribuyen en 528 ganaderías, una media de dos ejemplares por explotación.
En las ayudas concedidas por la Diputación para asociaciones, la protección a esta raza continúa patente, y la Asociación Nacional de Criadores de la Raza Asnal Zamorano-Leonesa (Aszal) ha sido la mayor beneficiaria con hasta 18.525 euros. Le sigue la Asociación Española de criadores de ganado bovino selecto de Raza Sayaguesa con 15.675 euros, la Asociación Española de Criadores de Ganado Bovino Selecto de Raza Alistana-Sanabresa (Aecas) con 17.100 euros y la Asociación Española de Criadores de Ganado Caprino “Agrupación de las Mesetas” (Ancam) con 3.700 euros. Las cuatro asociaciones beneficiarias podrán subvencionar actividades formativas relacionadas con la conservación y mejora de la raza que representan, publicidad y divulgación y desarrollo de programas de conservación y mejora genética o esquemas de selección. También podrán destinar las ayudas a la organización y celebración de concursos morfológicos nacionales de la raza que se celebren en municipios de menos de 5.000 habitantes de la provincia de Zamora.
Por otro lado, la explotación de estas razas autóctonas es otra de las garantías de su supervivencia y consolidación en el tejido ganadero de la provincia, un sector que cuida la riqueza medioambiental y la biodiversidad del campo zamorano, siempre ligado a la ganadería.